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Arquitectos: Miguel Montor; Miguel Montor
- Área: 1700 m²
- Año: 2012
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Fotografías:Moritz Bernoully, Onnis Luque
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Proveedores: Novaceramic
Descripción enviada por el equipo del proyecto. Como parte del seguimiento al plan maestro de renovación del colegio nuevo continente campus Querétaro, surge la oportunidad de generar este segundo ejercicio, correspondiente al edificio para el grado de preescolar.
Este se presenta como una de las piezas claves para la imagen del colegio, ya que no solo guarda el uso de preescolar, si no que es el edificio mediante el cual, se tiene acceso al conjunto, además de ser el contacto directo con la ciudad tomando discurso pleno con la cinta urbana, que aunque tímida, ya está presente hasta este lado de la ciudad.
El proyecto se genera en su totalidad bajo tres grandes premisas vitales para poder lograr la encomienda, cumplir con un presupuesto muy apretado, ejecutar la obra en tan solo 5 meses y reutilizar al máximo la estructura preexistente. Tras analizar estos puntos y cumpliendo cuidadosamente con el correcto funcionamiento del inmueble, se establece una planta arquitectónica clara y básica, un esquema sencillo para su ejecución y lograble en el corto plazo del cual se contaba, así mismo y bajo estas reglas de juego, se establece la paleta material que corresponde directamente a estas condicionantes, un edificio que pudiera prefabricarse en un alto porcentaje, para lograr por así decirlo, “solo armar las piezas en sitio”.
Fachadas de concreto prefabricado, canceles tipo (vanos iguales ), estructura de acero (obedeciendo a la estructura existente ), divisiones interiores a base de aluminio y cristal totalmente modulados y un basamento de block vidriado que brinda facilidad para su futuro mantenimiento, son los básicos que conforman la tectónica del edificio.
El partido arquitectónico en tres grandes volúmenes que se sobreponen a un basamento ligero y dinámico, permitió unificar visualmente las dos etapas estructurales con las que el edificio se compone, tanto con la mayor parte de la estructura existente como con la nueva; Un pasillo central que distribuye y vestibula en su totalidad todas las aulas, dirección y servicios es la única y clara circulación, así mismo el edificio cuenta con una importante rampa peatonal para el acceso al segundo nivel, como clara postura de accesibilidad, regalando dinamismo al edificio y cumpliendo con uno de los grandes ideales del colegio, el poder acceder a todos los edificios en sus diferentes niveles por medio de rampas peatonales.
El color forma parte importante dentro de la concepción del edificio, tanto para la imagen de un preescolar como para la misma identidad del inmueble dentro de su conjunto, se seleccionó el color amarillo como símbolo del grado y se utilizó dentro de la composición de las fachadas estableciendo un diálogo suave entre el concreto aparente de las fachadas prefabricadas y el ritmo de la ventanería con color.
El resultado, un edificio muy claro en su concepción, con una imagen fuerte y dinámica hacia la ciudad, otorgando un lobby generoso al peatón y al vehículo, un proyecto sintético y racional, sin altas pretensiones y claros resultados.